Relato erótico
!Vaya con la amiguita¡
Hacía mucho calor y fue a darse un baño a la piscina de sus padres. Su madre y su hermana se habían ido de compras y estaba solo. Una amiga de su hermana apareció en la puerta y le dijo que había quedado con ella para darse un baño.
Víctor – Málaga
Todo ocurrió la semana pasada. Había sido una semana de calor soporífero, yo me disponía a aliviar mi calor ese sábado en la piscina de casa de mis padres.
Mi madre y mi hermana se fueron de compras y mi padre había ido a trabajar a la oficina, tenía toda la piscina para mi solito y eso me gustaba.
Estaba plácidamente fresquito adormilado en la tumbona de la piscina cuando escuché la puerta. Volvieron a llamar a la puerta y me di cuenta que no lo había soñado, me levanté de mi tumbona y fui a abrir la puerta.
Al abrir la puerta al otro lado me encontré con Laura la mejor amiga de mi hermana. Laura me preguntó por mi hermana, le dije que se había ido de compras con mi madre, entonces ella bajó la cabeza, se quedó cinco segundos con su mirada fija en un punto y luego levantó la cabeza con la cara totalmente colorada. Miré abajo y me di cuenta que mi polla se había despertado muchos antes que yo. Rápidamente volteé mi cuerpo y le dije a Laura que entrara mientras que yo ponía mi paquete hacía arriba para que se bajara.
-Ponte cómoda mientras llamo a mi hermana.- le dije.
Tras un largo rato hablando con mi hermana, mi erección bajó.
-Laura, dice mi hermana que se le había olvidado, dice que te pongas uno de su bikinis y que la esperes que vendrá para la hora de comer.
-Vale, voy a subir a ponerme el bikini – me fijé en cómo saltaba su culito y sus pechos subiendo las escaleras.
Laura es una chica delgada como mi hermana pero tiene unos pechos enormes que debido a su delgadez resaltan más.
Volví a mi fortaleza de la soledad, mi tumbona, mis gafas y mi cerveza bien fría.
Al momento apareció en la piscina Laura luciendo un bikini amarillo de mi hermana. Mi hermana es igual de delgada que Laura pero en cuanto a pechos Laura superan a los de mi hermana con creces. Me tomé mi tiempo para mira de arriba a abajo a la amiga de mi hermana mientras que ella se recogía el pelo en una coleta.
Me estuve fijando en su largas y delgadas piernas, en su culito apretadito en el bikini amarillo, luego subí la mirada por su vientre plano acabando fijando la vista en su enormes pechos ocultos bajo el pequeño bikini amarillo de mi hermana, acabando el repaso visual en su pelo y en su cara angelical con esos rasgos de niña que poseía aún.
-¿Cómo me queda?
-¿Te digo la verdad?
– Si.
-Estás bellísima.
Se sonrojó y rió alegremente, luego cogió impulso y se lanzó al agua.
Comenzó a nadar de un lado a otro de la piscina, yo desde mi tumbona miraba como su cuerpo pasaba de un lado de la piscina a otro. Entonces
Laura me invitó a entrar en el agua con ella.
Así pues me metí a la piscina. Empezamos arrojarnos agua y a bromear, yo aprovechaba para de vez en cuando acercarme a ella y abrazarla cariñosamente, lo que sentía era indescriptible, todo su cuerpo era firme y duro, accidentalmente tocaba sus tetas y sus nalgas y cada vez estaba más excitado por lo que cuando ella se salió, yo le dije que quería quedarme un rato más; esto claro fue una excusa para que se me bajara mi calentura, ella salió de la piscina chorreando agua, por todo el camino desde la piscina a la tumbona que estaba junto a la que estaba sentado yo anteriormente.
No estaba relajado del todo pero de todas formas me salí del agua y me tumbé en la tumbona de al lado, al calorcito del sol: Laura estaba tumbada boca abajo aparentemente dormida. Mi polla, con el recuerdo de los juegos acuáticos volvió a crecer en mi bañador, la miraba de reojo y Laura seguía boca abajo. Yo empecé a deshacer el nudo de mi bañador, ella seguía boca abajo, introduje mi mano dentro del mi bañador, ella no se movía, comencé a tocar mi polla moviéndola de arriba abajo mientras miraba el culo de Laura, ella seguía boca abajo dormida. Cerré los ojos, recordaba su figura al salir de la casa con el bañador, los roces que había tenido con sus pechos, los roces con su trasero mientras que me estaba haciendo una paja a escasos metros de ella.
De repente, ella se movió y yo como pude saqué la mano pero mi polla seguía erecta, ella se quedó mirando fijamente el bulto que hacía mi polla, entonces me preguntó si ese bulto era mi polla, yo asentí con la cabeza, luego me dijo que porque estaba tan grande y yo le dije que era por su culpa. Laura se quedó sorprendida entonces aproveché para quitarme el bañador y mostrarle mi polla, ella se quedó más sorprendida.
-¿Quieres tocarla? -ella no le quitaba la mirada de encima y con la cara de sorpresa aún asintió con la cabeza.
Sentándose en la tumbona enfrente de mi, yo me senté frente a ella con mi polla totalmente erecta. Se quedó mirándola entonces yo le tomé una de las manos y la posé sobre mi polla. Al principio ella no hacía ningún movimiento luego comenzó a acariciarla desde la punta hasta los huevos, luego le tomé la otra mano diciéndole que no fuera vergonzosa que no mordía. Con una manos acariciaba mi polla con la otra mano jugaba con mis huevos como si fueran una bolas chinas de masaje.
Bajo su bikini sus pezones se había vuelto más visibles fue entonces cuando dirigí mis manos a sus pechos tocándolos por encima de bañador, ella recibió mi gesto con un sobresalto pero luego comenzó a disfrutar de mis tocamientos, luego tiré del cordón del bikini y desaté el cordel, y luego sacándolo por encima de su cabeza deje sus pechos al aire, por fin veía los pechos que tantas veces me había imaginado, eran grandes pero no estaban caídos, señal de su joven edad, tenía un lunar cerca del pezón derecho que me entró ganas de comérmelo pero estaba disfrutando de cómo me cogía la polla y como jugaba con mis huevos la amiga de mi hermana.
Mi polla estaba en tal punto que si tuviera piernas saltaría de mi cuerpo corriendo, entonces se me ocurrió levantarme y me puse frente a ella, poniéndole la polla a la altura de su rostro, y le dije que me la mamara. Ella dijo que no sabía cómo hacerlo yo le dije que no se preocupara, pasando mi polla por su mejillas y sus labios varias veces le dije que sacara la punta de su lengua, a lo que ella obedientemente hizo. Pasaba mi polla por la boca medio abierta de Laura y su lengua humedecía mi polla, poco a poco comenzaba a meter mi polla en su boquita que poco a poco se iba abriendo. Cuando estaba suficientemente abierta le dije que la chupara, ella igual que ante muy obediente empezó a chupar la cabeza de mi polla , después poco a poco se la fue metiendo a la boca, y después de un rato la podía ver totalmente suelta comiéndome la polla totalmente desbocada de excitación.
Tras un rato comiéndome la polla, yo le dije que se quitará su bañador para que estuviéramos más cómodos y así podría enseñarte algunas cositas muy ricas. Ella se tumbó y yo cogiéndole de la parte de abajo del bikini se lo quité, quedamos los dos desnudos sobre la tumbona. Yo le empecé a chupar todo su cuerpo pasando por sus tetas, sus pezones y su lunar, bajando por su barriga hasta llegar a su coñito rosado.
Comencé a meter mi lengua y chupar su clítoris y se lo chupaba como si fuera un caramelo, le pregunté si le gustaba y ella me dije que sí. Entonces le abrí las piernas, ella se quedó mirándome fijamente desde el otro lado, quedando su chocho justamente enfrente de mi polla, luego con cuidado empecé a bajar y subir mi polla metiéndosela lentamente para que no le doliera tanto ya que pensaba que era virgen, hasta que le entró toda mi polla, puse mis manos sobre sus pechos y comencé a empujar para que mi polla entrara más adentro después de un rato sentí le llegaba su primer orgasmo y la hacía temblar, tras ello puse mis manos sobre su trasero y comencé a empujar más fuerte llegando a su segundo orgasmo yo aceleré el ritmo y acabé corriéndome, con el cuidado de no hacerlo dentro de ella sino que la saqué de su coño húmedo. Salieron disparos de semen desde mi polla hasta todos los lados, gran parte cayó en su cara, pelo pechos y barriga otra parte al suelo. Después de haber follado la cogí en brazos y nos fuimos a dar una ducha para lavarla y por supuesto luego nos metimos desnudos en la piscina donde estuvimos besándonos y tocándonos.
Luego me enteraría que mi hermana no había quedado con ella ese día y que el bikini que tomó prestado de mi hermana era el que más chico le quedaba, había sido todo un plan de Laura para que me la follara.
Saludos