Relato erótico

Vacaciones fantásticas

Charo
14 de noviembre del 2018

Mientras follaba le contaba a su mujer sus fantasías eróticas y ella se ponía muy cachonda. No pasaban de aquí, hasta que fueron de vacaciones a la playa.

Joan – Barcelona
Me llamo Joan, soy de Barcelona y nunca pensé que llegaría a escribir un relato contando alguna experiencia mía porque cuando le comentaba a mi mujer alguna fantasía que yo tenía, ella se ponía cachonda pero nunca me dejaba que las llevásemos a cabo hasta que sucedió esto que voy a contar.
Primero decirte que somos una pareja del montón. Yo. 1,70, moreno y el típico cuerpo de un casado, es decir, con algo de barriga. Mi mujer, 1,65, una delantera de 95, con el pelo rubio y rizado. Como he dicho antes, yo siempre le contaba, cuando nos metíamos en la cama, algún que otro sueño erótico, pero solo había conseguido que alguna vez se pusiese faldas corta ya que, como es una despistada, a la que no se fijaba, lo enseñaba todo, o cuando se agachaba se le veía todo el trasero.
Solemos ir a veranear a unos apartamentos que hay en Playa de Aro, una bella población de la costa catalana, que tienen una terraza con cristales. Una mañana nos levantamos y cuál fue mi sorpresa al ver que en el apartamento de al lado, que en los días anteriores no había nadie, ahora estaba ocupado. Luego supe que por dos italianos. Me hice el despistado y no se lo dije mi mujer, con lo cual nos pusimos a desayunar en la terraza, ella solo con un minúsculo tanga y una camiseta de estas tan cortas, tipo top. Al cabo de un rato, mi mujer se dio cuenta y más cuando notó como ellos no le sacaban los ojos de encima. Entonces ella me miró y me dijo:
-Tú ya sabías que estaban ahí y me da la sensación que comprobando que dos tíos me están observando en tanga, te excita de verdad.
Le dije que de verdad estaba a cien y ella, para rematar, se levantó, les saludó con un gesto de su mano y se puso a mirar a la calle de pie, delante de ellos, para que pudieran admirar sin trabas sus piernas desnudas hasta la cintura, sus nalgas totalmente al aire y sus prominentes tetas apretadas por el top.
Así estuvimos todo el día, mi mujer paseándose medio desnuda y yo caliente como un horno. Llegó la noche y ella se puso un tanga blanco, una falda muy corta y una camiseta bien ceñida.
-Hoy voy a saber hasta dónde llegas – me dijo con una mirada viciosa que yo desconocía.
Al cabo de unas horas, volvimos al apartamento. Los dos teníamos un enorme calentón y nos fuimos a la terraza. La luz de la terraza de los vecinos estaba apagada por lo que supusimos que no estaban en casa. Sentándonos los dos en la silla extensible, mi mujer mirando a la pared, nos empezamos a acariciar y meter mano hasta que, mirando por encima del hombro de mi esposa, vi que se encendía la luz de los vecinos y como uno de ellos salía a la terraza. Al vernos y con toda la cara, cogió una silla y se sentó a mirarnos.
-Cariño – le dije entonces a mi mujer -uno de los vecinos nos está mirando.
-Bueno, es igual, tú sigue metiéndome mano – me contestó ella, con gran sorpresa por mi parte.

dsc_0020

Entonces levanté su falda hasta dejar el tanga y todo su culo al aire empezando a acariciárselo, cogiéndole las nalgas y abriéndoselas para que el vecino tuviera una mejor vista. Al poco rato le quité también la camiseta, dejándola prácticamente desnuda. Mi mujer, excitada a tope, se bajó de mis piernas, se arrodilló entre ellas y sacándome la polla al aire, se la metió en la boca, empezando una fuerte e intensa mamada. El italiano, viendo eso, se la sacó y empezó a meneársela. Yo tenía un calentón tremendo y no era para menos, allí, sentado en una silla con mi mujer chupándome la polla y enseñándole el culo a un tío que se la estaba pelando. Entonces cogí la silla y la fui moviendo, acercándola a la terraza del vecino, hasta que le hice un gesto al chico para que tocara a mi mujer. Cuando la mano del hombre llegó a la raja de mi esposa, ella solo gimió pero se abrió un poco más de piernas.
Después de estar un rato metiéndole los dedos posibles en el coño, porque a otra cosa no llegaba, yo me corrí solo de verlo, llenando la boca de mi mujer con toda la descarga de leche que contenían mis huevos.
-Ahora solo faltan los vecinos -me dijo mi esposa tras relamerse los labios.
Se apoyó en el balcón dándome la espalda y cogiéndole la polla al vecino, se la metió en la boca. Esta visión, su mamada a un extraño y ese culazo al aire, hicieron que mi polla, a pesar de haberme corrido hacía solo unos minutos, se volviera a empinar así que, separándole las nalgas se la metí de un golpe en todo el coño, empezando a follármela mientras ella se la chupaba al italiano. Todo esto me llevó a una nueva corrida al mismo tiempo que ellos me acompañaban con la suya.
En silencio, sin habernos dicho ni una palabra, nos metimos cada uno en su apartamento y ya a solas, mi mujer me dijo:
-¡Cómeme el coño otra vez hasta correrme, que llevo un calentón terrible!
Tras llenarme la boca con sus jugos, nos fuimos a dormir y a la mañana siguiente, ya que nos íbamos, fuimos un rato a la piscina como despedida, donde apareció el italiano. Estuve hablando con él, comunicándole que nos íbamos este mismo día, mientras mi mujer se metía en la piscina. El hombre se despidió pero al poco rato mi mujer, dentro de la piscina, se puso al borde de la misma a hablar conmigo pero notando como, a los pocos minutos, me hablaba raro. Como era una piscina sobre elevada, yo solo veía su cabeza hasta que vi al italiano abrazado a ella por la espalda.
-Me tiene una mano en la teta y tres dedos de la otra dentro de mi coño… – me dijo mi mujer entre gemidos.
En la piscina había gente y a mi mujer le dio vergüenza por lo que se salió aunque yo, al verla tan excitada, le pregunté:
-¿Quieres que nos vayamos al apartamento? – y al decir mi mujer que sí, pregunté al chico si nos podía grabar.
-Sí, puedo, pero a cambio te pido que tú no participes hasta el final.

dsc_0004

Acepté, entramos en el apartamento y aunque costó romper el hielo, al final se abrazó a mi mujer por detrás y empezó a sobarla toda hasta tumbarla en la mesa del comedor y empezó a comerle el coño. Ella me miraba, como esperando mi reacción pero, al ver que yo me la había sacado fuera del pantalón y mientras que con una mano grababa, con la otra me la meneaba, se relajó y le chupeteó todo el cuerpo hasta que él la cogió, la hizo ponerse de rodillas y metiéndole la verga en la boca, se la hizo chupar. Al poco rato, con la polla tiesa como un palo y dura como el cemento, la tumbó en el suelo, se le puso encima y empezó a metérsela lentamente.
Cuando se la tuvo metida entera en el coño, empezó a follársela hasta que ella en pleno delirio del placer que el orgasmo que acababa de recibir le estaba dando, le pidió a gritos que se corriera. El italiano, gruñendo como un toro y acelerando al máximo sus acometidas en el coño de mi esposa, eyaculó con fuerza, llenándole las entrañas con su caliente semen.
-Ahora métesela tú – me dijo él, mientras se la sacaba del chorreante coño – A mi me la va a limpiar con la boca, mientras te la follas.
Así lo hicimos hasta quedar los tres completamente satisfechos. Nos vestimos, él se fue a su apartamento y nosotros para casa, sin saber ni siquiera su nombre. Mi mujer disfrutó mucho pero, por el momento, dice que no quiere repetirlo aunque espero que no pase mucho tiempo hasta que tengamos otra aventurilla que, por supuesto, ya os contaré.
Besos y hasta otra.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies.

Aceptar

ACEPTAR
Aviso de cookies


relatoseroticos"relatos pirno""relatos eroticos dominacion""revistas porno españolas""relatos porono""relatos eroticos en castellano""clima revista x""relatos eroticos dominación""relatos. eroticos""tetonas tatuadas""intercambios porno""relatos sexo no consentido""relatos eròticos""relatos casadas""textos eróticos""relatos eroticos nosotras"www.revistaclima.com"relatos erotiocos""relatos sex""suegra cachonda""intercambios de parejas porno""sexo en grupo""revista clima es""relatos parejas""relatos de charo medina"climarelatos"relatos eroticos españa""relatos heroticos""revista clima com""lucia lapiedra dinio""textos porno""relatos de intercambios de parejas""chochetes calientes""contactos eroticos bcn""mis relatos eroticos""revistas eroticas""relatos bisexuales""videos eroticos online""cuentos relatos eroticos""super tetas naturales""revista clima fotos""relatos eroticos amateur""revista clim""relatos prno""textos eroticos""porno amateur españa""lesbianas eroticas""relatos de charo medina""rwlatos porno""relato erotico playa nudista""realtos porno""trio erotico""revista porno clima""maria lapiedra mamada""relatos eroticos para adultos""relato ero""rebista clima""se folla a la criada"relatos.porno"relatos de sexso""anuncio sex coruña""escritos eroticos""revista xxx""porno intercambios de parejas""relato clima""follada por dos negros""clima revista x""charo medina relatos"www.revistaclima.com"revista clima..com"relatosmaduras"contactos sex""relatos pormo""relatos clima""maridos consentidos""mamada a dos bocas"