Buen espectáculo II

Segunda parte y última del caliente relato que nos envió Marina. Se montaron una fiesta de locura. No os lo perdáis.

Marina – VALENCIA
Amigos de Clima, con el título de “Un espectáculo erótico gratis”, publicasteis la primera parte de mi testimonio. Os recuerdo que me llamo Marina, tengo 22 años, mido 1,67, morena, tetas medianas, culito pequeño, no estoy nada mal aunque no tengo nada en especial, soy una chica normalita. Mi novio se llama Andrés, llevaba con él dos años cuando ocurrió esto.
También os dije que para animar la reunión empezamos a jugar con la prenda de darnos besos mas o menos largos, de ahí pasamos a las acaricias y al final acabamos follando como locos. Y acababa diciendo que Sandra movía el culo de adelante hacia atrás, gozando como una loca, hasta que estiró la mano hacia atrás y le agarró la polla a mi novio, que estaba cerca de su culito y se puso a hacerle una paja.
– ¡Tiempo! – gritó Fermín.
– ¡Aaah… me corrrrroooo… Andrés… siiiiií…! – exclamó Sandra
Sandra se corrió metiéndose dos dedos de Andrés hasta el fondo de su boca y apretando la polla de mi novio contra su mano. Entonces Andrés se sentó a mi lado, no se había corrido, la polla le iba a reventar los pantalones y se la iba guardando, apenas le entraba en el pantalón, y a mi no digamos, la escena me había dejado más caliente todavía, cosa que creía que era imposible. Lo único que tenía en la cabeza era que quería correrme de una vez.
Luego tiró Lola y se dio un muerdo con mi novio, Andrés se dio un muerdo de 5 segundos con Sandra, que parecía que se había quedado más tranquila, como Carlos después de correrse, y luego tiré yo.
– ¡6! – Dije, esta era la oportunidad de correrme – Y ahora un 3… con… ¡Fermín!

Nos pusimos de pie, nos empezamos a morrear, como siempre detrás de Lola, era la oportunidad de Fermín de devolverle a Andrés lo que había hecho con su novia. Le bajé un poco el pantalón y el calzoncillo, le agarré la polla y me puse a meneársela despacio. Fermín gozaba como un cabrón, me bajó los pantalones con las bragas hasta las rodillas y me puso apoyada contra la mesa de espaldas a él, como antes Andrés había hecho con su novia. Se puso detrás de mi y me empezó a pasar la punta de su polla por mi culo, arriba y abajo, arriba y abajo. Me iba a volver loca y yo movía el culo como una desesperada, no me importaba que me la metiera por el culo allí mismo, pero yo creo que Fermín no se atrevía por lo que me giré y nos besamos mientras él dejaba toda su polla extendida en la raja de mi culo.
– Vamos Fermín… ¡se muere de ganas por que se la metas! – dijo Carlos.
– Le está gustando mucho – dijo Lola.
– ¿Te gusta? – me preguntó Fermín.
– ¡Aaah… siií… por favor sigue un poco más! – dije moviendo mi culo contra su polla.
– Nunca la había visto tan caliente – dijo mi novio.
– ¡Pues creo que mi novio se la va a follar! – dijo Sandra algo molesta.
– ¿Ah si? – dijo mi novio – Ni se te ocurra metérsela que no llevas condón puesto.
– ¡Déjale que me la meta Fermín! – casi supliqué.
– Métesela, te mueres de ganas, pero métesela por el culo… ¿me has oído? ¡Métesela por el culo a mi novia!
Yo giré mi cabeza y le besé en su barbilla completamente desesperada diciéndole:
– ¡Vamos, métemela en el culo, métemela en el culo, por favor, métemela! – le dije agarrándole la polla y poniéndola a la entrada de mi culo.

– Te vas a enterar – dijo Fermín
Se pegó un escupitajo en la mano y se la pasó por toda la polla. Era increíble, allí apoyada contra la mesa, viendo a todos mis amigos, a punto de recibir la polla de Fermín por el culo. El se cogió la polla y me la puso a la entrada, eso hizo que casi me corriera, empujó un poco, no entraba, yo apretaba el culo contra su polla, se escupió en la mano, me la pasó por el culo, incluso metió un dedo en él, otra vez me la puso en el culo y la pude notar, como su polla se iba abriendo paso en mi ano, esto hizo que me corriera una primera vez.
– ¡Aaah… más… fóllame el culo cabrón…!
– Que culito tan maravilloso, te lo voy a follar bien
Se puso a embestirme por el culo, con una mano me subió la camiseta y me sobó las tetas delante de todos, incluso tiró del sujetador hacia arriba para que me vieran bien los pechos. Yo estaba gozando como una puta, encima mi novio se había sacado la polla y se la estaba meneando allí, pero Lola se puso a su lado y se la cogió.
– ¿No prefieres que te haga yo la paja? – le dijo a mi novio.
– Oh sí, házmela tú – le contestó él poniéndole la mano a Lola sobre su polla.
– ¿Te excita ver como le dan por el culo a tu novia? – le dijo Lola meneándosela lentamente.
– ¡Siiiií… aaaah…vamos sigue, sigue con tu paja…!
Yo no podía parar de jadear, como me estaba follando el culo Fermín. Sandra y Carlos nos miraban, Lola también debía estar bastante caliente, pues se morreaba con mi novio mientras se la meneaba muy despacio.
– Chúpamela un poco – le dijo mi novio a Lola.
– No, eso no – protestó ella.
– Venga un poco – le dijo tirando de su cuello hacia su polla.
Entonces Lola engulló la polla de mi novio sin pestañear. Fermín seguía metiéndomela por el culo, yo le había pasado un brazo por detrás de su culo para que me la metiera más fuerte diciéndole:
– ¡Más fuerte, más fuerte, que me voy a correr otra vez!
– Yo también me voy a correr… aaah… no puedo más… ¿Donde quieres que me corra? – me preguntó Fermín.

– En mi culo… ¡Échamela dentro del culo… córrete en mi culo… dame tu leche…!
Justo en ese momento mi novio, que miraba alternativamente como se la chupaba Lola y como me daba por el culo Fermín, se corrió dentro de la boca de Lola exclamando:
– ¡Tomaa… Lola… siií… me corro en tu bocaaa… aaah…!
Esta sacó la polla de su boca después de recibir dos disparos de crema y lo que quedaba se restregó la polla de mi novio por la cara sacando su lengua, hasta que su cara quedó perdida de semen.
– ¡Vamos Andrés, córrete en mi cara, córrete por mi cara, asiiiiiií… muy bien, dámela toda cariño! – dijo restregándose la polla de mi novio por la cara.
Yo, viendo esto, me corrí, mientras Fermín a la vez echaba todo su semen dentro de mi culo diciendo:
– ¡Toma Marina… aaaah… mi lecheee… toma…!
– ¡Aaaah… me corrooo…! – contestaba yo – ¡Siií… siií… en el culo… échamela en el culo… que bueno… aaaah… que biennnnn…!
Nos quedamos jadeando unos momentos, Fermín todavía con la polla en mi culo metida. Habían sido las 2 mejores corridas de mi vida. Mi novio bajó los pantalones a Lola y la puso encima de la mesa abierta de patas, le hizo una gran comida de coño, y Lola también se corrió aplastando la cara de Andrés contra su coño…
Fue una orgía que no olvidaré jamás.
Besos.