Relato erótico

Trío conseguido

Charo
17 de enero del 2019

A su actual mujer, antes de casarse, le gustaba el sexo y era muy caliente cuando follaban. Poco a poco se ha ido enfriando y él se ha obsesionado con la idea de montar un trío, cosa que con su mujer es imposible. Puso un anuncio en la revista Clima y cuando le contestaron al anuncio no podía creérselo. Llamó a un amigo y los dos fueron a conocer a la chica.

Julio – Cádiz
Hola a todos y todas los lectores hace algún tiempo he venido leyendo las historias que se publican aquí, por eso es que hoy me he decidido a contarles la grandiosa historia de algo que me sucedió en realidad y quién sabe, con ayuda tal vez pueda repetirla.
Comenzaré diciendo que vivo en Cádiz, tengo 37 años y estoy casado en segundas nupcias desde hace poco más de 2 años, peso 72 kilos y voy al gimnasio, por lo que tengo un buen cuerpo, no soy un Adonis ni mucho menos pero no soy tan feo y no estoy tan mal, sin embargo mi segundo matrimonio no ha funcionado todo lo bien que yo quisiera, sobre todo en el aspecto sexual, veréis, mi esposa es un poco recatada, cosa que antes de casarnos no era y eso me conquistó, por eso es que la historia que les voy a contar viene de una fantasía largamente acariciada y después de algunos años por fin se hizo realidad.
Resulta que después de leer algunos relatos el deseo de convertir mi fantasía en realidad se hizo cada vez más grande hasta casi obsesionarme. Siempre había querido compartir a una mujer con otro hombre, es decir hacer un trío de dos hombres y una mujer, pero por razones sentimentales nunca me había decidido. Pues bien un día puse un anuncio en vuestra revista con muy pocas esperanzas, lo confieso, pero un día, cuando casi ni me acordaba de mi anuncio, recibí una carta firmado por una tal Cristina y diciendo que su fantasía era la de estar con dos hombres a la vez y tener la follada del año. Yo, por supuesto, respondí inmediatamente y le di mi número de móvil pues no podía arriesgarme a que mi esposa contestara al teléfono. Al día siguiente una voz desconocida en mi móvil me distrajo de mi trabajo, preguntando por mi nombre:
– Sí, soy yo – dije – ¿Quien habla?
– Cristina – contestó la voz.
En ese momento mi verga se disparó hacia adelante como presagiando lo que podía venir. Después de algunas palabras, la verdad no recuerdo cuales pues estaba bastante nervioso y excitado, quedamos en vernos en un restaurante cerca de la salida a la carretera, ya que allí hay una zona donde hay bastantes hoteles muy discretos.
– Ya verás lo que nos espera – dijo Cristina de una forma por demás cachonda que casi me hace correr.
En cuanto colgué con Cristina me dediqué a pensar quién sería el amigo más indicado para compartirla y al fin me decidí por José, un amigo de 33 años de cabello negro al cuál conocía desde hace mucho y habíamos ido de parranda en varias ocasiones, aunque nunca como lo íbamos a hacer esa noche.
Llegó la hora citada y José y yo parecíamos niños a punto de ver su película favorita, nos retorcíamos las manos y no podíamos estar quietos.

img_9940

Por fin llegó Cristina, aunque cuando la vimos entrar no nos imaginábamos que una mujer así estuviera dispuesta a tener sexo con dos hombres al mismo tiempo. Ella se acercó y preguntó por mi nombre y en cuanto oí esa voz, la misma que por teléfono, mi verga respondió como un resorte y por los movimientos de José para acomodársela me imagino que la del también.
– Sí, soy yo – respondí – y tómate algo para romper el hielo.
Estuvimos cerca de media hora, la cual se me hizo extremadamente larga pues al ver aquel par de nalgas enfundadas en un pantalón de moda que se ciñe a la altura de las caderas y va haciéndose ancho a medida que llega a las pantorrillas, y que luchaban por salir como invitando a perderse entre ellas en un santiamén. Llevaba un top blanco sin sujetadores que, gracias a una repentina corriente de aire, dejaba ver dos pezones tiesos, una boca ancha y pintada de rojo parecía decir déjame mamarte esa verga. Después de terminar y pedir la cuenta un tanto apresurados, subimos al coche y me dirigí al hotel más cercano no sin antes decirle a José que se agachara para que no hubiera problema en entrar los tres.
No bien habíamos cerrado la puerta cuando Cristina se abalanzó sobre nosotros y besándome en la boca metiendo la lengua como si quisiera arrancarme las amígdalas comenzó a desabotonarnos los pantalones a los dos casi al mismo tiempo. Cuando mi polla y la de José estuvieron libres de su prisión ella se agachó y sacando la lengua lamió a todo lo largo las dos vergas, la de José un poco más grande que la mía pero en ese momento Cristina parecía no importarle el tamaño sino tratar de meterse las dos al mismo tiempo a la boca, cosa que logró, y que a mí hizo sentir algo diferente al sentir la verga de José jugando “espadazos” con la mía, pero en ese momento no iba a ponerme a pensar, nos habíamos convertido en animales deseosos de sexo y nada más.
Con las dos pollas en la boca, Cristina comenzó a alternarlas, metiéndose la mía hasta que logré sentir en la punta la campanilla de Cristina, para luego sacarla mojada y brillante de saliva, después hizo lo mismo con José mientras ella me pajeaba la verga arriba y abajo, cuando se dio cuenta que mi verga estaba circuncidada, miró hacia arriba y mirándome a los ojos dijo:
– ¡Que capullo más hermoso!
Dicho esto comenzó a lamer la punta para luego bajar por el tronco con la lengua, para luego volver a subir y ensartársela toda de nuevo hasta la garganta, José estaba que no podía, y recostándola en la cama comenzó a comerle el chocho, metiendo la lengua en su vagina, cuando encontró su clítoris comenzó a succionarlo mientras ella daba gritos de placer y se arqueaba sin soltar mi polla, ni dejar que se saliera de su boca, después de eso José le dio vuelta y apuntando su verga al coñito de Cristina hundió su barra hasta que los huevos chocaron con su pubis, Cristina solo acertaba a decir:

img_9945

– ¡Por fin tengo dos vergas para mi solita y las voy a dejar secas de leche, así… así… aaah… aaaah…!.
Inmediatamente volvió a meterse mi verga en la boca, después de un rato de estar así le pedí a José que cambiáramos posiciones, así que José tomó mi lugar frente a la boca de Cristina y yo entre sus nalgas, mientras iba dando la vuelta para quedar detrás de Cristina pude admirar en todo su esplendor sus nalgas con el pantalón y las bragas todavía a medio muslo y la tetas colgando, ya que yo sí le había quitado el top dejando una enormes tetas al aire. No pude resistir y arrodillándome puse mi cara sobre sus nalgas y alargando los brazos hacia adelante me dediqué a darle un beso negro mientras mi nariz y mi lengua se hundían en la deliciosas raja de sus nalgas, y mis manos apretaban y sobaban esas deliciosas tetas que ahora tenían los pezones a punto de reventar y no creo que de frío.
Cristina se corrió al menos dos veces, unos estruendosos gritos:
– ¡Aaay… aaay… ooooh… aaah… me corrooo…!.
Me levanté y apuntando hacia su culo ensarté mi polla en su culo, dilatado por el delicioso beso negro que le había hecho, solo fue cuestión de apoyarla y entró como con mantequilla, mientras José a punto de correrse, la saco de la boca de Cristina y haciendo que ella se acostara sobre él dirigió se la metió en el chocho, en pocos segundos estaba siendo follada por los dos agujeros.
Gritaba como una loca pidiendo más y más. Oyendo estos gritos y no pudiendo más saqué la verga del culo de Cristina, y tratando de no correrme, la limpié como pude y se la metí en la boca, en ese mismo momento me corrí largamente. Tragaba sin protestar, y cuando José iba a correrse, lo hizo sobre las tetas. Después de esto nos quedamos acostados los tres un buen rato sin decir palabra, hasta que Cristina dijo:
– ¿Qué os parece si nos bañamos los tres?
José y yo intercambiamos miradas de complicidad y la seguimos al baño, mientras nos enjabonábamos o mejor dicho mientras la enjabonábamos y ella a nosotros, comenzó a hacerse evidente nuestra excitación pues ya teníamos las vergas de nuevo a mil, por lo que mientras ella le hacia una nueva mamada a José, apoyado en la pared, yo me la comencé a follar de a cuatro patas. Solo se oían gemido y gritos de placer. Nos corrimos los tres a la vez.

img_9968

Después de eso y ya mas relajados nos terminamos de bañar y nos vestimos, salimos de la habitación y con José agachado de nuevo, la acompañamos hasta un taxi, prometiendo que lo repetiríamos, por desgracia Cristina se fue a Estados Unidos y yo me quedé con las ganas de repetir es deliciosa experiencia
Saludos y hasta otra.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies.

Aceptar

ACEPTAR
Aviso de cookies


"relatos salvajes eroticos"revistaclima.com"relatos eroticos sexo""relatos prono""cuentos porno""relatos nudistas""rwlatos eroticos""contactos de sexo""lucia lapiedra dinio""porn relatos""relatos ertoticos""relatos de amas de casa""revistaclima com""intercambios de pareja porno""española caliente""relatos eroticos sexo""relatos calientes""historias de sexo""revista xxx""erotico sexo"muygolfas"cuentos relatos eroticos""revista porno""textos eroticos""relatos erlticos""relatos erotic"revistaclima.com"relatos eroticos de abuelas""porno para adultos""relato bisex"taylorblumer"contactos x""revista clima relatos""revista clim""revists clima""relatos madura""relqtos eroticos""relatos eroticos revista clima""relatos madura""grandes relatos eroticos""todo re latos""ver revista clima""revista climas""reletos porno""relatos porno lesbicos""relatos er""relatos erticos""historias guarras""relatos porno con maduras""follada por todos los agujeros""vaya tetas""contactos sexuales barcelona""trio bisex""relatos eroticos clima""escritos porno""contactos amateur""revista climas""anal bestial""le come el culo""revista clima relatos""revista porno online"relatoserotico"revista supertetas""realtos porno""ver revista clima""lib porno""relatos eroticos clima""charo medina revista""contactos bisex""porno bisex""revistaclima com""relatos porno playa""relatos eroticos lesbicos""fotos revista clima""relatos maduros""nadia daferro""relatos intercambio""super tetona"revistaclima"relats eroticos""relatos erotics""relatos revista clima""relatos eroticos españoles""relatos de charo medina""revista clima..com""libros porno""la revista clima""relstos porno""relatos oorno""contactos eroticos""revista clima com""leer porno""revistas porno españolas""revista clima 21""relato eróticos""relatos sumision""contactos de sexo""la revista clima""mansion de nacho vidal"